lunes, 7 de marzo de 2011

Odio sentirte triste, odio que haya algo que día a día te hunda un poquitín más, pero lo que más odio es saber que lloras. Es como que el alma se me suicida automáticamente en cuanto escucha una palabreja depre salir de tu boca. Cariño puedes dejar que el cansancio te eche un pulso, pero nunca permitas que salga ganando; pues tienes la fuerza suficiente para seguir adelante, pero quiero que sepas también que puedes contar con mi apoyo, con mi sonrisa, con mis abrazos, con mis besos, con mi cariño, con mi todo.

Y es que eres el tipo de persona de la que cuando alguien se acuerda, no puede evitar sonreír.

No hay comentarios:

Publicar un comentario